Sunday, March 16, 2014

Un poco de historia

Dragomán. Lenguaraces. Lenguas. Truchimán. ¿A qué se refieren? Antiguamente el intérprete se llamaba de muchos nombres diferentes. No es seguro exactamente cuando empezó la actividad de interpretación, pero hay referencias (sobre todo a traducción a la vista) en la Biblia.

Los pueblos antiguos estaban separados por sus lenguas y durante mucho tiempo el uso de gestos era suficiente para la interacción entre la gente. Con más desarrollo llegó una mayor dificultad a la comprensión, y por eso la gente empezó a intentar interpretar entre las lenguas de los pueblos. Era considerada una “habilidad útil” hasta el tercer milenio a.C. en Egipto y desde entonces es considerada una profesión, tanto si era respetada como si no.

 Imagen de EcuRed.cu

Los primeros usos de la interpretación incluyeron campañas, negociones y comercio y después en la vida religiosa y con la gestión de ejércitos; actividades en las que actualmente trabajan intérpretes también. Eran principalmente esclavos que interpretaban porque ya sabían la lengua de su tierra, pero a veces los hijos de nobles educados en el extranjero servían como intérpretes.

Aunque esta habilidad resultó útil, la profesión no era respetada por dos razones mayores: la presencia extendida de las lenguas como el latín o el griego y el miedo y la duda de no saber si el intérprete (muchas veces esclavo) transmitiera la información verdadera. Tanto era este miedo que el emperador Caracalla pidió que mataran a todos los intérpretes de lengua por ser infieles. En años posteriores la profesión no era dudosa sino remunerativa. Por ejemplo, con la colonización de las Indias los castellanos necesitaban una manera de hablar y intercambiar con los nativos. Enseñaban español a unos indios y desde entonces siempre tenían unos intérpretes accesibles. Los franceses que viajaban hacia Canadá hacían lo mismo con los nativos del norte. Aunque es cierto que los reinos europeos buscaban cierta hegemonía de las nuevas tierras y la extensión de sus lenguas fue una manera buena de lograrla, también era una necesidad para la continuación del comercio en el nuevo mundo.

No fue hasta la Conferencia de París después de la primera guerra mundial que fue sugerido la profesión moderna de intérprete (antes siempre era una habilidad más que un trabajo). Nació la interpretación simultánea para comunicar en conferencias internacionales y no perder tiempo. Con este sistema conectaron el orador con el intérprete para que todo el mundo pudiera entender un mensaje en su propia lengua a la vez que hablara el orador. Con nuevas tecnologías y la aparición de videoconferencias llegó una expansión de interpretación internacional. Hoy en día las Naciones Unidas son el mayor empleador de intérpretes profesionales.

Bibliografía de referencia

Jiménez Ivars, María Amparo. Primeros pasos hacia la interpretación inglés-español. Castelló De La Plana: Universitat Jaume I, 2012. Print.

"Orígenes De La Interpretación." EcuRed.cu. N.p., n.d. Web. 16 Mar. 2014.

¿Qué es la interpretación?

En principio, es muy fácil definir la práctica de la interpretación. Interpretar significa traducir de una lengua a otra oralmente. Pero la interpretación está compuesta de unos elementos diferentes que no corresponden a la traducción (que serán discutidos en la entrada número 3). Realmente “El objetivo de la interpretación es lograr que el oyente comprenda plenamente el significado y la intención del mensaje, como si hubiera sido expresado en su lengua materna” (Jiménez Ivars 2012:28).

La interpretación existe hoy en día como una actividad de ocio o de ayuda (amigos o familiares entre ellos mismos), pero también es un trabajo profesional.  En los dos casos, hay que tener en cuenta que es siempre un proceso de interacción humana directa. Esta interfaz (punto de confluencia entre los dos usuarios) significa que las palabras están transmitidas instantáneamente, a diferencia de la traducción que tiene una entrega más retrasada. Pero no solo las palabras están intercambiadas, sino también un conjunto de significados y contextos afuera de las propias palabras. Danica Seleskovitch afirma que “true interpreting… is a process of making sense,” es decir, el trabajo de un intérprete es expresar un mensaje que tiene sentido, no solo hacer un cambio verbal (Pym et. al. 2006:221). La interpretación tiene elementos de lengua, cognición, interacción y cultura, y por eso destaca como un estudio ajeno a los estudios de traducción.

La división de las modalidades de la interpretación es a veces controvertida, pero lo más normal es definirla con cuatro modalidades principales: traducción a la vista (considerada interpretación por su estado verbal), interpretación de enlace, interpretación consecutiva y interpretación simultánea. Entre ellas se puede hacer otra división entre “submodalidades.” La gráfica adjunta explica los tres grandes tipos de interpretación y cuales son sus subdivisiones. Traducción a la vista no está incluida porque solo consiste en leer un texto o documento en voz alta y traducirlo a una segunda lengua a la vez, y no hay subdivisiones. Tampoco está incluida en la gráfica la interpretación de la lengua de signos, aunque es una forma válida de interpretación, porque es un estudio más reciente y muy diferente de los otros tipos de interpretación.


 *Gráfica adaptada de Primeros pasos hacia la interpretación inglés-español de María Amparo Jiménez Ivar, página 65.


Bibliografía de referencia

Jiménez Ivars, María Amparo. Primeros pasos hacia la interpretación inglés-español. Castelló De La Plana: Universitat Jaume I, 2012. Print.

Pym, Anthony, Miriam Shlesinger, Zuzana Jettmarová, eds. Sociocultural Aspects of Translating and Interpreting. Amsterdam: John Benjamins Publishing Company, 2006. Biblioteca de la Universidad de Sevilla. Web. 15-16 Mar. 2014.

Sáez Rivera, Daniel M., Jorge Braga Riera, Marta Abuín González, Marta Guirao Ochoa, Beatriz Soto Aranda, and Nava Maroto García, eds. Últimas tendencias en traducción e interpretación. Vol. 46. Madrid: Iberoamericana, 2011. Print. Lingüística Iberoamericana.